Si piensas que el dinero que vas a tener, siempre va a proceder de tu trabajo, nunca te harás rico. Un aumento después de cinco años de arduo trabajo no te hará rico, a lo mejor ni siquiera te llega para cubrir la hipoteca de la casa más grande que te has tenido que comprar ahora que tienes familia. Si crees que el trabajo es tu única manera de generar ingresos, vas por mal camino. Cambia tu forma de pensar. Mira el mundo de otra manera. Coge lápiz y papel y escribe cada día tres ideas que te puedan aportar dinero, por muy estrambóticas que te parezcan. La ideas no cuestan dinero pero pueden generar muchísimo efectivo. Y recuerda la ley de oro de la riqueza: No te rompas la espalda trabajando, consigue que los demás trabajen para ti.
Milos Benson Brais